
Desde hace más de dos décadas, me cuesta muchísimo poder observar el firmamento, de manera serena, con mis telescopios, mis prismáticos y mis ojos, cada vez resulta más complicado debido a la llamada CONTAMINACIÓN LUMÍNICA.


Me sorprende encontrar personas de mi edad e incluso mayores que han vivido toda su vida en la gran ciudad, que en un viaje al campo y una visita guiada al cielo conmigo no hayan visto en su vida a la Vía Láctea o Camino de Santiago, que es un bonito y destacado manchón de luz, como lecheada y con un trasfondo de miles de millones de estrellitas, que atraviesa el cielo y cambia su posición con los meses del año.

Nosotros vivimos en un barrio acomodado donde hay poquita densidad estelar, es como un barrio donde hay casas unifamiliares y grandes parcelas aquí y allá, es un lugar "relativamente" tranquilo de nuestra galaxia, pues si la Galaxia tiene un radio medio de 15 Kpc* y el Sistema solar -nosotros- distamos a 8,5 Kpc, pues es como si viviendo en una gran ciudad, por ejemplo Ciudad de México D.F.** , he situado el centro de la galaxia en El Zócalo y el extremo en Necahualcóyotl, tan sólo he supuesto Kpc (Kiloparsec) como si fuese Km (kilómetro), pues nosotros viviríamos a la altura del Aeropuerto Internacional Juárez (MEX) para que se hagan una idea aproximada.
En el caso de Málaga, si imaginamos el centro galáctico desde la rotonda del Marqués de Larios lanzamos una distancia de 15,33 km en dirección SW, llegamos a los barrios altos de Torremolinos, ése sería el borde de la galaxia, pues bien, el Sistema Solar está a la altura del Aeropuerto Costa del Sol-Pablo Ruiz Picasso (AGP) para que os hagáis una idea.
Hoy en día, el concepto de constelación establecido y considerado por la Unión Astronómica Internacional / International Astronomical Union (U.A.I./I.A.U.) está desmarcado de la consideración histórica y tradicional. De tal forma que, se considera constelación a un sector del cielo, un sector que forma una superficie dentro de la esfera celeste. Los límites de las constelaciones vienen dados por una barreras conveniadas que son paralelas tanto a la ascensión recta como a la declinación celeste. Así vistas las cosas, cuando se ve un planiferio celeste y no aparece otra cosa que los borders, parece que estamos divisando los EE.UU. de América con su división en estados.
Han quedado 88 constelaciones oficiales, establecidas por la Unión Astronómica Internacional, intentando dejar las que de alguna forma tienen una historia mítica o bagaje cultural más asentado y siempre, desde un prisma pro-occidentalista, aunque en el fondo, la fuente básica es orientalista, relacionadas con las tradiciones astrológicas míticas de Grecia y Roma, que a su vez, bebieron un poco de tradiciones mesopotámicas y egipcias. Posteriormente, el desarrollo de la astrología árabe medieval condujo a la traducción de los escritos y cataterismos grecorromanos, que incorporaron a la tradición mitológica árabe pre-musulmana, cuyo principal foco cultural estaba ubicado en Bagdad y Alejandría antes del siglo V de nuestra era.
Queda fuera de consideración, la tradición astrológica china, así como la de otros muchos pueblos y civilizaciones, que convendría rescatar.
En English Wikipedia, muchos estudiosos de origen chino están incorporando información sobre las tradiciones astrológicas chinas en los artículos relacionados con las constelaciones y las estrellas, también hay algunas incorporaciones tardías de la tradición astrológica hindú, o incluso de los pueblos mesoameríndios, pero en general, hay un gran vacío sobre todo ésto en la bibliografía, de hecho, soy incapaz de encontrar información bibliográfica en español que me pueda dar de primera mano una garantía de traducción de escritos árabes medievales o incluso anteriores para conocer la tradición astrológica, tengo que basarme en lo que leo en distintos idiomas, principalmente en inglés, en fuentes de carácter universitario y en personalidades eruditas de reconocido prestigio internacional.
No es nuevo para el instruído ciudadano que desde hace un par de décadas, se está intentando romper con la fuerte tendencia de centralización de la cultura, me refiero al prisma eurocentrista, que no es otra cosa, que el ego colectivo, el orgullo de la raza.
En los estudios históricos, estamos viviendo tiempos muy interesantes pues la historia como bagaje cultural, se está intentando rescatar de esa historia sucinta y manipulada por la moda de la época o el liderazgo ideológico incuestionable.
Un hecho que no es nada despreciable y que es muy importante tener hoy en día en cuenta, es que el eurocentrismo va acompañado del pensamiento católico, que tiene el efecto de una espesa niebla, donde es imposible divisar más allá, es por lo que el occidental medio, carece de la cultura mínima que un ciudadano mundial debería tener, pues su educación ha sido muy localista, e incluso interesadamente manipulada desde el aparato del Estado y desde la Iglesia Católica.
Lo mismo sucede en la Civilización Musulmana, todo está canalizado a través del aparato del Estado y de lo que los Muyyadym, Ayatolás y demás religiosos condicionan a la población, educación muy interesada para el servicio a sus respectivas sociedades.
Afortunadamente, las personas librepensadoras están aumentando el cupo y están subiendo el listón, a nivel mundial, la noosfera no para de crecer en datos y datos, llamémosle la esfera de internet, pero ya sabéis lo que pasa: Un exceso de información, puede ser, un riesgo grave de caer en la tentación de creerlo todo, ser manipulado o incluso saturarse al punto de contradecirse, no obstante, más que una sociedad de la información vivimos justo lo contrario, y que la censura siempre ha estado y siempre estará.
De Ud. depende crecer en estos aspectos, por lo que deberá de luchar por sí mismo para adquirir su propio bagaje cultural, ser su propio periodísta, porque la recompensa es maravillosa, es como subirse a un ático de un edificio para contemplar toda la ciudad, mientras el resto de la gente se desenvuelve en sus cotidianos quehaceres, el librepensador se alza en las más altas cumbres y disfruta del conocimiento adquirido con esfuerzo y rigor.
** Kpc, Kilo-parsec, es una medida de longitud que no pertenece al sistema internacional de unidades, pero que está adoptado como oficial en el ámbito de la astronomía. El parsec es un acrónimo inglés que significa paralaje (par) y segundo (sec, de second), pues bien, la distancia a la que una hipotética estrella estaría, si medimos su posición en la esfera celeste respecto a cuerpos extremadamente lejanos (por ejemplo, un quasar), y hacemos esa medición angular en dos momentos orbitales opuestos, por ejemplo, a primeros de enero y a primeros de agosto (tiene que haber exactamente 1/2 recorrido orbital, aproximadamente 31 557 600 +/- 99 segundos debe de transcurrir entre medición y medición para conocer el ángulo subtendido máximo), pues si la estrella se ha "movido" de su sitio, un segundo de arco, está a una distancia de 3,26 años luz, o lo que es lo mismo, lo que la luz recorre en 3,26 años que en kilómetros viene a ser una enorme distancia: 30 863 230 000 000 +/- 1 100 000, casi 31 billones de kilómetros. Pues bien, un kiloparsec, son 1.000 parsecs, y es una medida que se utiliza para medir distancias intergalácticas, entonces, 1000 pc = 1 Kpc = 3.260 años-luz = 30 863 299 200 000 000 +/- 99 999 999 Km = 31.000 billones de kilómetros.
Han quedado 88 constelaciones oficiales, establecidas por la Unión Astronómica Internacional, intentando dejar las que de alguna forma tienen una historia mítica o bagaje cultural más asentado y siempre, desde un prisma pro-occidentalista, aunque en el fondo, la fuente básica es orientalista, relacionadas con las tradiciones astrológicas míticas de Grecia y Roma, que a su vez, bebieron un poco de tradiciones mesopotámicas y egipcias. Posteriormente, el desarrollo de la astrología árabe medieval condujo a la traducción de los escritos y cataterismos grecorromanos, que incorporaron a la tradición mitológica árabe pre-musulmana, cuyo principal foco cultural estaba ubicado en Bagdad y Alejandría antes del siglo V de nuestra era.
Queda fuera de consideración, la tradición astrológica china, así como la de otros muchos pueblos y civilizaciones, que convendría rescatar.
En English Wikipedia, muchos estudiosos de origen chino están incorporando información sobre las tradiciones astrológicas chinas en los artículos relacionados con las constelaciones y las estrellas, también hay algunas incorporaciones tardías de la tradición astrológica hindú, o incluso de los pueblos mesoameríndios, pero en general, hay un gran vacío sobre todo ésto en la bibliografía, de hecho, soy incapaz de encontrar información bibliográfica en español que me pueda dar de primera mano una garantía de traducción de escritos árabes medievales o incluso anteriores para conocer la tradición astrológica, tengo que basarme en lo que leo en distintos idiomas, principalmente en inglés, en fuentes de carácter universitario y en personalidades eruditas de reconocido prestigio internacional.
No es nuevo para el instruído ciudadano que desde hace un par de décadas, se está intentando romper con la fuerte tendencia de centralización de la cultura, me refiero al prisma eurocentrista, que no es otra cosa, que el ego colectivo, el orgullo de la raza.
En los estudios históricos, estamos viviendo tiempos muy interesantes pues la historia como bagaje cultural, se está intentando rescatar de esa historia sucinta y manipulada por la moda de la época o el liderazgo ideológico incuestionable.
Un hecho que no es nada despreciable y que es muy importante tener hoy en día en cuenta, es que el eurocentrismo va acompañado del pensamiento católico, que tiene el efecto de una espesa niebla, donde es imposible divisar más allá, es por lo que el occidental medio, carece de la cultura mínima que un ciudadano mundial debería tener, pues su educación ha sido muy localista, e incluso interesadamente manipulada desde el aparato del Estado y desde la Iglesia Católica.
Lo mismo sucede en la Civilización Musulmana, todo está canalizado a través del aparato del Estado y de lo que los Muyyadym, Ayatolás y demás religiosos condicionan a la población, educación muy interesada para el servicio a sus respectivas sociedades.
Afortunadamente, las personas librepensadoras están aumentando el cupo y están subiendo el listón, a nivel mundial, la noosfera no para de crecer en datos y datos, llamémosle la esfera de internet, pero ya sabéis lo que pasa: Un exceso de información, puede ser, un riesgo grave de caer en la tentación de creerlo todo, ser manipulado o incluso saturarse al punto de contradecirse, no obstante, más que una sociedad de la información vivimos justo lo contrario, y que la censura siempre ha estado y siempre estará.
De Ud. depende crecer en estos aspectos, por lo que deberá de luchar por sí mismo para adquirir su propio bagaje cultural, ser su propio periodísta, porque la recompensa es maravillosa, es como subirse a un ático de un edificio para contemplar toda la ciudad, mientras el resto de la gente se desenvuelve en sus cotidianos quehaceres, el librepensador se alza en las más altas cumbres y disfruta del conocimiento adquirido con esfuerzo y rigor.
NOTAS FINALES:
* He puesto el ejemplo de Ciudad de México, D.F., por el hecho que la mayoría de mis seguidores son mexicanos a los que mando un apreciado saludo y les invito a que me escriban sus comentarios y dudas.** Kpc, Kilo-parsec, es una medida de longitud que no pertenece al sistema internacional de unidades, pero que está adoptado como oficial en el ámbito de la astronomía. El parsec es un acrónimo inglés que significa paralaje (par) y segundo (sec, de second), pues bien, la distancia a la que una hipotética estrella estaría, si medimos su posición en la esfera celeste respecto a cuerpos extremadamente lejanos (por ejemplo, un quasar), y hacemos esa medición angular en dos momentos orbitales opuestos, por ejemplo, a primeros de enero y a primeros de agosto (tiene que haber exactamente 1/2 recorrido orbital, aproximadamente 31 557 600 +/- 99 segundos debe de transcurrir entre medición y medición para conocer el ángulo subtendido máximo), pues si la estrella se ha "movido" de su sitio, un segundo de arco, está a una distancia de 3,26 años luz, o lo que es lo mismo, lo que la luz recorre en 3,26 años que en kilómetros viene a ser una enorme distancia: 30 863 230 000 000 +/- 1 100 000, casi 31 billones de kilómetros. Pues bien, un kiloparsec, son 1.000 parsecs, y es una medida que se utiliza para medir distancias intergalácticas, entonces, 1000 pc = 1 Kpc = 3.260 años-luz = 30 863 299 200 000 000 +/- 99 999 999 Km = 31.000 billones de kilómetros.
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