CORAZÓN DE JUVENTUD
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Un relato corto sobre el primer viaje que realizan unos jóvenes amigos.
Por José Antonio Galán Baho
Paris______________ Berlín__________ Praga___________ Bratislava
Le Sacré Coeur___ Bradenburg Tor ____Río Moldava______ Río Danubio
Tres días han pasado desde que mis amigos y yo salimos desde Málaga rumbo a la aventura, acabábamos todos de cumplir la mayoría de edad, estábamos celebrando que entraríamos a estudiar en la universidad el próximo curso y entre los días de calor de un mes de julio especialmente tórrido, soñábamos en la playa con hacer un largo viaje y recorrer muchos paises. Joaquín tuvo la idea de surgerirnos comprar un billete interrail para jóvenes: Que si nos ahorramos estancias en albergues, durmiendo mientras viajamos, que cada día estamos en un sitio distinto ...
Era nuestro último verano juntos y nosotros creíamos que íbamos a permanecer juntos para siempre. Por estos días de julio, concretamente el 16,día de la Virgen del Carmen, han pasado ya veintiocho años.
Joaquín murió hace tiempo, llevaba años pidiendo que nos volviésemos a reunir los tres para repetir ese viaje que nos marcó la vida. Hoy en Port-bou estoy con mi amigo Luis para tomar el primer tren francés rumbo a Lyon, nos acompañan mi hijo Alejandro y Manuel, el hijo de Luis, ambos tienen en entorno a los dieciséis años de edad y son también amigos entre sí.
Llegamos a París, en una visita al Loùvre, las inmensas salas dedicadas a Egipto fascinaron a los dos jóvenes, al igual que en su día nos fascinaron a nosotros, también alquilamos unas bicicletas y subimos al monte para llegar hasta la basílica del Sagrado Corazón y admirar mi barrio favorito: Montmartre, donde contemplamos la puesta de sol para acercarnos a pie hasta la estación del norte y tomar el tren nocturno hacia Berlín.
En el viaje que un día hicimos, no pensábamos en otra cosa que en atravesar el telón de acero y visitar los países de la órbita socialista. Durante la dictadura, el pasaporte español no permitía la entrada a estos paises, pero era 1.982 y con algunas restricciones se podía viajar hacia el este. Para ir desde Berlín-Pankow hacia Berlín Este, podía visitarse en un pase de un solo día, pues en general, no permitían pernoctar, se exigía visado de turista y justificar a la salida un gasto un mínimo de 30 dólares.
Alejandro quedó fascinado con la modernidad de los edificios y carreteras de la ciudad,ahora continuaríamos nuestro camino hacia el sur, rumbo a Praga, capital de la República Checa, antes Checoslovaquia. Estábamos fascinados pues a lo largo de este viaje no había control de pasaportes y el tren pasaba de un país a otro casi sin darnos cuenta porque por fín Europa es una realidad natural.
Cómo ha cambiado Europa en estos años, desde la República Checa, pasando por Viena, Bratislava, Budapest, Belgrado, Sofía... visitando los nuevos paises que han quedado después de la terrible guerra Yugoslava y que daban paso a los balcanes orientales, pues íbamos en dirección a Grecia.En la última noche, en el tramo Sofía - Salónica, mi hijo comentó : "Papá que bonito sería poder viajar con Interrail por todo el mundo" y los cuatro nos quedamos dormidos con la ilusión de poder conocer el mundo desde el tren, pero para eso, tendría que pasar mucho tiempo... [FIN]
Le Sacré Coeur___ Bradenburg Tor ____Río Moldava______ Río Danubio
Viena ___________________Belgrado______________ Sofía
Playa de Tesalónica_ Atenas: Paternón y al fondo el monte Licabeto_Délfos
Θεσσαλονίκης παραλίας ___Αθηνών Πατερνώνας και Λικάβητου Βούρνο__Δέλφη
Εste relato participa en el concurso que organiza la revista ALTAÏR, RENFE e INTERRAIL. Si te gusta, vótame en el blog de ALTAÏR antes del 15 de julio de 2.009 para poder optar al premio.
Tres días han pasado desde que mis amigos y yo salimos desde Málaga rumbo a la aventura, acabábamos todos de cumplir la mayoría de edad, estábamos celebrando que entraríamos a estudiar en la universidad el próximo curso y entre los días de calor de un mes de julio especialmente tórrido, soñábamos en la playa con hacer un largo viaje y recorrer muchos paises. Joaquín tuvo la idea de surgerirnos comprar un billete interrail para jóvenes: Que si nos ahorramos estancias en albergues, durmiendo mientras viajamos, que cada día estamos en un sitio distinto ...
Era viernes, mis padres se habían marchado a Tolox a pasar el fín de semana, no les quise acompañar y les dejé una nota, pues sabía que no me iban a permitir marcharme con unos amigos de viaje y mucho menos al extranjero, pero al llamarle por teléfono desde Madrid, y ver que íbamos los tres, sin entrar en más detalle,quedaron más tranquilos.
Era nuestro último verano juntos y nosotros creíamos que íbamos a permanecer juntos para siempre. Por estos días de julio, concretamente el 16,día de la Virgen del Carmen, han pasado ya veintiocho años.
Joaquín murió hace tiempo, llevaba años pidiendo que nos volviésemos a reunir los tres para repetir ese viaje que nos marcó la vida. Hoy en Port-bou estoy con mi amigo Luis para tomar el primer tren francés rumbo a Lyon, nos acompañan mi hijo Alejandro y Manuel, el hijo de Luis, ambos tienen en entorno a los dieciséis años de edad y son también amigos entre sí.
Joaquín nunca fue padre pues era periodista y viajaba por todo el mundo hasta que llegó su día, una mina le segó su vida para siempre en la lejana Camboya, y de poder haber elegido, lo mejor fue lo que lo pasó pues no hubiese soportado estar el resto de sus días en una silla de ruedas o peor aún mutilado.
Nadie lo reclamó , hasta que Sonia, su única hermana nos pidió que la acompañásemos. Fue en Phnum Pénh donde tomamos la dura decisión de dejarlo enterrado allí en un cementerio católico, gracias a la gestión de un cura español, amigo de Joaquín.
Llegamos a París, en una visita al Loùvre, las inmensas salas dedicadas a Egipto fascinaron a los dos jóvenes, al igual que en su día nos fascinaron a nosotros, también alquilamos unas bicicletas y subimos al monte para llegar hasta la basílica del Sagrado Corazón y admirar mi barrio favorito: Montmartre, donde contemplamos la puesta de sol para acercarnos a pie hasta la estación del norte y tomar el tren nocturno hacia Berlín.
En el viaje que un día hicimos, no pensábamos en otra cosa que en atravesar el telón de acero y visitar los países de la órbita socialista. Durante la dictadura, el pasaporte español no permitía la entrada a estos paises, pero era 1.982 y con algunas restricciones se podía viajar hacia el este. Para ir desde Berlín-Pankow hacia Berlín Este, podía visitarse en un pase de un solo día, pues en general, no permitían pernoctar, se exigía visado de turista y justificar a la salida un gasto un mínimo de 30 dólares.
Alejandro quedó fascinado con la modernidad de los edificios y carreteras de la ciudad,ahora continuaríamos nuestro camino hacia el sur, rumbo a Praga, capital de la República Checa, antes Checoslovaquia. Estábamos fascinados pues a lo largo de este viaje no había control de pasaportes y el tren pasaba de un país a otro casi sin darnos cuenta porque por fín Europa es una realidad natural.
Cómo ha cambiado Europa en estos años, desde la República Checa, pasando por Viena, Bratislava, Budapest, Belgrado, Sofía... visitando los nuevos paises que han quedado después de la terrible guerra Yugoslava y que daban paso a los balcanes orientales, pues íbamos en dirección a Grecia.En la última noche, en el tramo Sofía - Salónica, mi hijo comentó : "Papá que bonito sería poder viajar con Interrail por todo el mundo" y los cuatro nos quedamos dormidos con la ilusión de poder conocer el mundo desde el tren, pero para eso, tendría que pasar mucho tiempo... [FIN]
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